lunes, 19 de noviembre de 2007

Amy Winehouse también tiene miedo volar











He recibido una visita breve de una de las mejores fuentes que tiene Beijing Chic en Inglaterra, algún día la pediré autorización para recopilar las historias que le han contado sus compañeras de trabajo y sus clientes. Gracias a esta visión entiendo que gente como Amy o Pete Doherty generan un impacto mucho menor en la sociedad británica que el problema de Melendi con el pacharán en España. Estos excesos son una realidad social aceptada en las islas, con la que saben convivir y a la que saben enfrentarse.

En el último viaje de Amy a Glasglow, según sus compañeros de pasaje, la cantante anoréxica, cuyo novio está en la cárcel, se pasó todo el viaje en el baño de la avión, fumando.

Nota: releyendo el post me doy cuenta de que se puede dar rienda suelta a la imaginación sobre mi amiga y su actividad laboral, protegiendo su identidad, pero salvando su reputación y la de su empresa, dejo este vídeo a mayor gloria de la sanidad y del estado de bienestar inglés.



Fuente: Celebrity Gossip

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