El silencio de los corderos, o de cómo el Madrid no levanta cabeza

Parece una ley inexorable, alguno de los dos grandes equipos del país debe estar en crisis. Puede ser la clave para vender periódicos y rellenar la tercera parte de los noticiarios. Es la sal de la vida. Según te toque estar en una de las curvas del ciclo uno se lo pasa bomba o se sume en una tristeza profunda. La alegría cuando se está arriba es doble: tú estás bien y el rival de tus amores está fatal. Por eso me solidarizo con cualquier intento de hacer un análisis frío y sosegado, de rebuscar en el recuerdo, y de tratar con energía de salir del pozo. Claro que yo en este caso.... se acuerdan del Silencio de los coderos, de cómo la chica secuestrada trataba de trepar por el pozo donde estaba presa, de lo que se encontraba por el camino... pues eso.